Pretendemos crear un lugar de reunión donde podamos intercambiar experiencias, opiniones, saberes y en definitiva aumentar la información de los ganaderos para tomar decisiones acertadas en nuestras empresas y defendernos de las decisiones arbitrarias que tanto están perjudicando nuestro patrimonio.
Los empresarios nos encontramos totalmente desinformados en muchos aspectos de nuestro ejercicio empresarial y sobre todo en las cuestiones sanitarias que afectan a nuestras ganaderías. Somos sujetos pasivos, sin voz ni voto, en las acciones que la administración toma unilateralmente y que siempre son en perjuicio del ganadero.
Trabajaremos para modificar las normas sanitarias implantadas por burócratas que desde despachos en Bruselas o desde el Servicio de Agricultura doméstico (ha desaparecido la Ganadería de nuestros ministerios) cercenan nuestro crecimiento empresarial. Es hora de que se tenga en cuenta la opinión del ganadero.